Después de una semana de entrenos y aprovechando que el viernes era festivo, cambiamos las series por una carrera de 8k. Nunca la habíamos corrido asíque fuimos un poco a la aventura, tampoco nos preocupaba mucho porque el Mister nos dijo que lo enfocásemos como un entreno más. Normalmente antes de una carrera con objetivos dos días antes descansamos, y el anterior lo aprovechamos para la "puesta a punto" En ésta no. Llevábamos entrenando desde el domingo sin pausa así que eso tenía que notarse en el rendimiento.
Una vez allí Lau, Carol, Luis (compi del trabajo además de triatleta) y Javi (otro compañero de trabajo) Juanqui y yo calentamos unos minutos pues la mañana, a pesar del sol, se presentaba bastante fría. Nos deseamos suerte y cada uno ocupa el lugar en la salida que cree correspondiente. Por lo visto no todos pensaron igual y algunas personas, que claramente correrían a ritmos inferiores, se pusieron delante del todo con consecuencias desastrosas, pero creo que esto será material para una entrada del blog específica. Me noto tranquilo, sé que tengo que hacerlo como siempre, lo mejor posible. Suena el pistoletazo y nos lanzamos. Muy rápido al principio, para no variar, pasando el primer km a 3:34. Mi cabeza sabe que ese no es mi ritmo, no todavía, así que había que aflojar y centrarse bien para afrontar el duro e irregular terreno al que nos enfrentaríamos, según algún amigo corredor nos había comentado minutos antes de la salida. La carrera constaba de 2 vueltas al mismo circuito así que era perfecto, una primera de reconocimiento y la segunda más táctica. Antes del km 3 Darío, un amigo de Juanqui y compañero blogero, me alcanza. Sé que tiene mejores marcas que yo pero si logro pegarme a él puede ser una buena opción para mí. No miro el crono, no me hace falta, quiero correr por sensaciones. Van cayendo los kilometros y me doy cuenta de que la carrera es más dura de lo que me imaginaba, subidas y bajadas constantes. A pesar de eso y después de la primera vuelta me noto que voy bastante bien aunque prefiero no arriesgar y mantener el ritmo "cómodo" Como todo no podía ser tan bonito, nada más pasar el km 5 aparece nuestro "amigo" el flato. Así se lo hago saber a Darío que se mantiene a mi lado rodando como sí no le costase nada! Intento recuperarme, controlar la respiración, pero es bastante complicado así que en una de las bajadas me freno un poco dejando a mi compañero que se aleje. No importa. He venido a aprender. Creo que en cada carrera siempre nos llevamos una nueva experiencia, situaciones de las que aprendemos y mejoramos. Tenía que luchar contra el flato como otro objetivo más. Por fin así sucede y me noto mucho mejor. Aumento el ritmo. Otra más. Se me desata el cordón justo de la zapatilla en la que llevo el chip, no quiero pararme, acabo de recuperar mi ritmo y no me lo puedo permitir así que sigo adelante rezando para que en una zancada no salga disparado. Esto se acaba, nos falta un km y yo me sigo encontrando mejor de lo esperado. Vuelvo a aumentar el ritmo y pasando el 7 alcanzó a Darío de nuevo. Sé que sólo queda un último esfuerzo y tengo fuerzas para echar el resto. Aceleró pegándome a otro corredor y al girar una curva encaro la meta para cruzar la meta sonriente marcando 30 minutos. Nada más terminar me dirijo corriendo de nuevo a la curva a esperar a Lorraine, que llegaría marcándose un sprint de los buenos. Juanqui, como siempre, como un tiro, Luis y Javi dándolo todo y disfrutando, Carol mejor cada día, en fin, un disfrute para todos. Organización perfecta y carrera de 10 y no de euros, como suelen ser los precios (como poco) de otras carrerar peor organizadas.
Esta semana me llevo buenas sensaciones, tanto en la carrera como en los últimos entrenos. Unas sensaciones que llevo buscando mucho tiempo, que en alguna entrada os contaré como son y que poco a poco van llegando. Me quedan 2 semanas para los 10k de Aranjuez y 3 para la Vallecana. Vamos a por ello!
Menuda carrera!! y qué os pasó con los cordones??? lo que nunca!!
ResponderEliminarCarol
Bien llevado bro, vas "carburando". Ya veras que bien en Aranjuez!
ResponderEliminar¡Lo de los cordones se nos fue a los dos!
Un abrazazo