XXXII CROSS INTERNACIONAL DE LA CONSTITUCIÓN

                    La mañana sabíamos que iba a ser fría. Según llegamos a alcobendas apetecía más quedarse en el coche con la calefacción que salir fuera, pero no quedaba otra. Una vez todos juntos, Juanqui, Javi, Lorraine y Carlos, un compañero de la Panda del Muro, calentamos reconociendo el circuito ya que a pesar del plano que teníamos no quedaba muy claro. Andábamos con el tiempo justo así que rápidamente y después de dejar la ropa sobrante a Carol y Vane, como siempre ayudando en todas las carreras cuando no participan, nos dirigimos a la meta guiados por una organización muy pendiente en todo momento del evento. Era mi primer cross y estaba algo sorprendido de cómo algo gratuito pueda tener esa buena organización. Quizá otro tipo de carreras nos tienen acostumbrados a sacarnos el dinero y preocuparse de poco más. Nos esperaban 4km por delante.

                    La línea de salida estaba abarrotada y había que estar pendientes ya que a escasos metros un cuello de botella amenazaba con complicar un poco las cosas. El pistoletazo no tardó en sonar y salimos! Efectivamente una parte dificil ya que si no andabas pendiente podías rezagarte bastante, y así me pasó. Una vez superada la zona inicial ya me acomodé a un ritmo rápido (3:46) pero bien llevado en un trazado todavía sencillo, aunque no iba a ser un camino de rosas. Pronto comenzaron las curvas, ziz zags con cuesta cortas pero pronunciadas, un auténtico "rompepiernas" al que, como corredor de ruta, no estaba acostumbrado.

Eso precisamente me hizo reservar un poco las fuerzas y regular quizá en exceso así que baje un poco el ritmo... mucho. (4:10 aprox) En la "rotonda" ví a José que animaba (una lesión en el tobillo el día anterior le impidió participar) Era un cross corto, a penas 4km, no hay margen para bajar el ritmo porque luego no hay  tiempo para recuperar. Cuando me dí cuenta de esto intenté apretar para rodar sobre 3:53 aproximadamente pero no había muchas más fuerzas. Adelantando a la 4º mujer seguí la estela de la tercera pero no había manera de cogerla entre curvas, repechos y demás orografía complicada. Aceleré lo que pude para ganar el mayor tiempo posible y entré en meta marcando alrededor de 15:30. La boca sabía a sangre. Tenía la sensación de no haber hecho una gran carrera, pero desde luego no me guardé nada dentro y dí lo que pude, así que satisfecho.

   

Equipazo!